Hoy, ciertamente, no nadaban ni Sandra ni Richard, los autores de los éxitos anteriores, pero teníamos un resto de esperanza de que la pareja de ciclistas que formaban parte del combinado estatal pudieran en la prueba de sprint olímpico – prueba de relevos de tres vueltas – pudieran cerrar las jornadas del velódromo de Laoshan con buen sabor de boca, después de
ese regusto amargo que la jornada del martes dejó a todos al no poder ver en podium ni a Amador Granado ni a Javier Otxoa. Hoy, los dos salieron a darlo todo en los 250 m que cada uno tenía que correr, pero enseguida se vio que las opciones del equipo estatal eran pocas por no decir nulas. El primer relevista, Roberto Alcalde, – un madrileño que siendo promesa del ciclismo estatal un guarda rail le segó una pierna mientras entrenaba con su bicicleta, y que en los pasados Juegos consiguió el oro en la prueba de persecución- marcó el peor tiempo de todos los participantes y los dos ciclistas vascos no pudieron mejorar esta posición. La carrera fue ganada por el equipo británico, seguido del de China y del de la República Checa.El balance del paso de nuestros ciclistas por el velódromo se cierra con dos diplomas paralímpicos que si bien les permite mantenerse en el grupo de los mejores, no satisface las expectativas que ellos mismos tenían cuando partieron hacia Beijing. Aún así el viernes y el domingo tienen posibilidades, y capacidad añadiríamos, para resarcirse en las pruebas de fondo en carretera, especialmente Javier Otxoa que ahoya ya en su terreno preferido,debe acallar las voces que cuestionan su hegemonía.
La jornada generó, en todo caso, una noticia relevante para el deporte adaptado vasco, pues la espectacular piscina olímpica fue testigo del debut de una jovencísima promesa de nuestro deporte. Ana Rubio, que con sólo quince años, pero una madurez impropia de su edad, es la más joven de los seleccionados en el conjunto estatal, hizo su presentación en la máxima competición internacional a primera hora de la mañana. Aunque no logró pasar a la final, ya que marcó el quinto puesto en su serie, firmó una interesante, y, sobre todo, prometedora actuación, que podrá ratificar en la prueba de 200 estilos que se celebrará en la mañana del jueves.
Mañana, igualmente, Richard Oribe volverá a competir en el Cubo, esta vez en el equipo de relevos estatal que,hoy por hoy, es superior a cualquiera de sus rivales, por lo que el donostiarra volverá a subirse al podium de vencedores con casi total seguridad.
La participación vasca en la jornada, tuvo en la cancha de boccia a las dos referencias de nuestro deporte en esta especialidad. Yolanda Martín y Santi Pesquera participan en la modalidad de parejas en el equipo estatal de la clase BC•3, que comenzó su concurso derrotando a Canadá por un contundente 9-1. En este deporte, de similitudes iniciales con la petanca pero con una reglamentación muy específica, se juegan 4 parciales en el que cada uno de los equipos debe lanzar 6 bolas consiguiendo la victoria el que coloca las mismas cerca de la “blanca” de referencia. En el primero de ellos la ventaja obtenida por la pareja fue de una boccia o bola; en el segundo consiguieron situar otras cuatro, en el tercero perdieron por una y finalmente, en el último, volvieron a situar cuatro boccias ganadoras más cerca de la blanca que las canadienses.
En el segundo de los partidos, el equipo estatal sufrió una dolorosa derrota ante el combinado chino, con un marcador de 1 a 5 que recoge parciales de 1-0, 0-1,4-0 y 0-1. En la matinal del jueves, se enfrentarán, dentro de la liguilla clasificatoria, al combinado de Corea, debiendo derrotarles si quieren pasar a las semifinales y, por tanto, optar a medalla.
En lo que hace referencia al medallero, China sigue al frente del mismo, con 77 metales, por delante de Gran Bretaña, que posee 43, y de Estados Unidos, 34. Ucrania, con 30, ocupa el cuarto lugar y es la auténtica sorpresa de los Juegos. El equipo estatal se encuentra en 10º lugar con un total de 22.
TXEMA ALONSO
FUNDACION SAIATU |